Talleres realizados por Cullu Anta ayudan al sustento de hogares andacollinos
Los participantes han aprendido medicina y comida ancestral, además de realizar telares mapuches y orfebrería precolombina.
Son muchas las personas que ya están elaborando productos y ayudando al sustento del hogar gracias a lo aprendido de la medicina y comida ancestral, telares mapuches y orfebrería en los talleres que ha impartido la Agrupación Diaguita Cullu Anta, con el objetivo principal de rescatar el patrimonio, la cultura, la prehistoria e historia de los pueblos originarios.
Cullu Anta se creó hace ocho años por la necesidad de mostrar y reflejar los temas de los pueblos originarios. “Nos formamos como agrupación porque en la comuna no había dónde aprender las enseñanzas de nuestros antepasados. Había que ir a Coquimbo, La Serena u otros lugares. Por tanto, nació para mostrar y culturizar más a la comunidad de lo que nos dejaron nuestros ancestros”, relata la presidenta Cullu Anta, Romina Cortés, una joven profesional y artesana andacollina.
El taller de orfebrería, el cuarto impartido por Cullu Anta bajo el título “Recuperación y revitalización de saberes ancestrales”, se llevó a cabo gracias al financiamiento de la Mesa Comunidad Andacollina Teck (CAT). En este espacio, los participantes aprendieron técnicas de corte y soldadura aplicadas a la joyería, con un enfoque especial en la preservación de la iconografía precolombina de Andacollo. Además, a lo largo de las distintas instancias formativas, han adquirido conocimientos en medicina, tejido en telar, gastronomía y orfebrería, todos orientados hacia el rescate y puesta en valor del legado ancestral.

Un oficio
En este curso, que se realiza los lunes y martes durante tres meses en la sede del Sindicato de Pequeños Mineros Pirquineros, participaron 29 personas, “que agradecen las enseñanzas, porque esto les abre puertas al crecimiento personal”, expresó la presidenta de la agrupación, quien destaca que postularon a una segunda etapa de este proyecto y es para mejorar ciertas habilidades y aprendizaje de dos de los talleres efectuados.
“El objetivo es que lo aprendido pueda ser concretado en un oficio y así producir nuestros trabajos como organización, también en forma individual de los participantes en los talleres. Es importante que esto sirva como economía circular de la comunidad y es positivo que personas que aprendieron la medicina ancestral, ya estén haciendo jabones y ayudando a la economía del hogar”.
El ciclo de cursos de este año concluye con el taller de orfebrería y “es importante aprender cosas nuevas, realizar lo que se aprende y que las personas se sientan parte de las tradiciones”, agregó la artesana y líder de la agrupación.
El taller, que abarca un grupo etario bien completo, porque también se enseña a niños y adultos mayores, concluirá con una ceremonia de certificación y una exposición para demostrar los trabajos realizados. Eso se efectuará en la Plaza Videla, donde se mostrarán videos con los niños del jardín realizando sus trabajos. La agrupación, donde participan activamente 15 personas, no sólo se reúne para los talleres, pues también lo hacen para organizar las celebraciones indígenas que hay en la comuna, además de múltiples actividades que tienen como objetivo enseñar las tradiciones a la comunidad.






